Plenitudes vacías. En torno a Pensar y no caer, de Ramón Andrés

Abstract

RESUMENEl avance tecnológico, la ausencia de principios fijos y la extrema individualidad han situado al ser humano actual en una ficción. La aparente plenitud de los tiempos deja entrever desde el principio un terrible vacío al que nos abocamos vertiginosamente.A partir de los dos últimos capítulos del libro de ensayo de Ramón Andrés, Pensar y no caer, publicado en 2016 en Acantilado, pretendemos realizar un análisis más global de los principios e hipótesis básicos de la obra para ver cómo se plasman estos en la sociedad. En los dos capítulos, “Muerte” y “Nada”, Ramón Andrés, acorde con el estilo del resto del libro, toma dos piezas de arte que le permiten reflexionar sobre las cuestiones propuestas que dan título a los capítulos. Para el capítulo de “Muerte” parte del Réquiem de Ligeti, una pieza inclasificable basada en una saturación extrema de sonido y en un desgarro continuo de voces e instrumentos que casi parecen gritar a la otra saturación que ya empezó a vivir Ligeti: la del mundo exterior. Tras la muerte, llega la nada. Para este último capítulo, Ramón Andrés escoge una película, El caballo de Turín, de un autor húngaro, Béla Tarr. Poco importa el argumento de la película. Importa más el ambiente vacío, el viento constante que es otra saturación hueca, como el Réquiem.El análisis más detallado de estas dos obras nos lleva a descubrir otra cara de esa muerte y esa nada de la que nos habla el autor de Pensar y no caer. La cara absurda, ejemplificada a su vez en este estudio, imitando el estilo del libro, con dos obras más: una ópera macabra de Ligeti, Le Grand Macabre y una obra dramática de Samuel Beckett, Esperando a Godot. Este lado más grotesco es el que oculta la otra realidad, la oscuridad del Réquiem y la que silencia el viento de Béla Tarr. En este absurdo es en el que vivimos instalados, intentando siempre olvidar.Ramón Andrés trata, como Ligeti en su Réquiem, de crear una sobresaturación de voces de todos los tiempos que refleja, por un lado, la plenitud vacía de nuestros tiempos y, por otro, el deseo de recordar para poder percibir esa cara oculta, darnos cuenta de a dónde vamos a precipitarnos para poder detenernos antes. Para poder pensar y, así, detener la caída. ABSTRACTThe technological development, the absence of fix principles and the extreme individuality have placed the contemporary human been as a fiction of itself. The apparent peak of the times let see from the beginning a horrible empty where we are going to fall vertiginously.From the two final chapters of Ramon Andres essay, Pensar y no caer, what was published in 2016 in Acantilado, we try to realise a more global analysis of the basics principles and hypothesis of the essay to research how these themes appear on the western contemporary society. The two chapters mentioned, “Muerte” (Death) and “Nada” (Nothingness), Ramón Andrés takes two pieces of art which permit the author thinks over the questions of death and nihilism. For the chapter “Muerte”, he starts from the Ligeti’s Requiem. It is a nondescript opera, which is based on the extreme saturation of sounds and noises. These are extracted from the real world, the outside world. After the death, the nothingness appears. For this last chapter, Ramón Andrés takes the Béla Tarr movie called El caballo de Turín. The plot is not important. The important in this movie is the emptiness and the sound of the wind, the only sound in the movie. The Requiem’s saturation is like the sound of the wind in Béla Tarr’s movie.The analysis of this works remarks the points what are not relevant in a first study. This is the essence of Pensar y no caer. The absurd face of the death is exemplified with two more works: Ligeti’s Le grand macabre and Beckett’s play Waiting for godot. This is the most grotesque side what is hidden from the conventional reality, what is important in the darkness of the Requiem and the sound of the wind in Béla Tarr’s movie. The absurd is the place where the western society are installed, always trying to forget.Ramón Andrés try, as Ligeti in his Requiem, to make a oversaturation of voices from all the times. In the one hand, the empty peak of our times, and in the other hand, the wish of remind to perceive this dark side. The work tries to create a conscience and to awake the way where we are going to for stop and meditate. The book was written to think and halt the fall down.

RESUMEN El avance tecnológico, la ausencia de principios fijos y la extrema individualidad han situado al ser humano actual en una ficción. La aparente plenitud de los tiempos deja entrever desde el principio un terrible vacío al que nos abocamos vertiginosamente. A partir de los dos últimos capítulos del libro de ensayo de Ramón Andrés, Pensar y no caer, publicado en 2016 en Acantilado, pretendemos realizar un análisis más global de los principios e hipótesis básicos de la obra para ver cómo se plasman estos en la sociedad. En los dos capítulos, “Muerte” y “Nada”, Ramón Andrés, acorde con el estilo del resto del libro, toma dos piezas de arte que le permiten reflexionar sobre las cuestiones propuestas que dan título a los capítulos. Para el capítulo de “Muerte” parte del Réquiem de Ligeti, una pieza inclasificable basada en una saturación extrema de sonido y en un desgarro continuo de voces e instrumentos que casi parecen gritar a la otra saturación que ya empezó a vivir Ligeti: la del mundo exterior. Tras la muerte, llega la nada. Para este último capítulo, Ramón Andrés escoge una película, El caballo de Turín, de un autor húngaro, Béla Tarr. Poco importa el argumento de la película. Importa más el ambiente vacío, el viento constante que es otra saturación hueca, como el Réquiem. El análisis más detallado de estas dos obras nos lleva a descubrir otra cara de esa muerte y esa nada de la que nos habla el autor de Pensar y no caer. La cara absurda, ejemplificada a su vez en este estudio, imitando el estilo del libro, con dos obras más: una ópera macabra de Ligeti, Le Grand Macabre y una obra dramática de Samuel Beckett, Esperando a Godot. Este lado más grotesco es el que oculta la otra realidad, la oscuridad del Réquiem y la que silencia el viento de Béla Tarr. En este absurdo es en el que vivimos instalados, intentando siempre olvidar. Ramón Andrés trata, como Ligeti en su Réquiem, de crear una sobresaturación de voces de todos los tiempos que refleja, por un lado, la plenitud vacía de nuestros tiempos y, por otro, el deseo de recordar para poder percibir esa cara oculta, darnos cuenta de a dónde vamos a precipitarnos para poder detenernos antes. Para poder pensar y, así, detener la caída. ABSTRACT The technological development, the absence of fix principles and the extreme individuality have placed the contemporary human been as a fiction of itself. The apparent peak of the times let see from the beginning a horrible empty where we are going to fall vertiginously. From the two final chapters of Ramon Andres essay, Pensar y no caer, what was published in 2016 in Acantilado, we try to realise a more global analysis of the basics principles and hypothesis of the essay to research how these themes appear on the western contemporary society. The two chapters mentioned, “Muerte” (Death) and “Nada” (Nothingness), Ramón Andrés takes two pieces of art which permit the author thinks over the questions of death and nihilism. For the chapter “Muerte”, he starts from the Ligeti’s Requiem. It is a nondescript opera, which is based on the extreme saturation of sounds and noises. These are extracted from the real world, the outside world. After the death, the nothingness appears. For this last chapter, Ramón Andrés takes the Béla Tarr movie called El caballo de Turín. The plot is not important. The important in this movie is the emptiness and the sound of the wind, the only sound in the movie. The Requiem’s saturation is like the sound of the wind in Béla Tarr’s movie. The analysis of this works remarks the points what are not relevant in a first study. This is the essence of Pensar y no caer. The absurd face of the death is exemplified with two more works: Ligeti’s Le grand macabre and Beckett’s play Waiting for godot. This is the most grotesque side what is hidden from the conventional reality, what is important in the darkness of the Requiem and the sound of the wind in Béla Tarr’s movie. The absurd is the place where the western society are installed, always trying to forget. Ramón Andrés try, as Ligeti in his Requiem, to make a oversaturation of voices from all the times. In the one hand, the empty peak of our times, and in the other hand, the wish of remind to perceive this dark side. The work tries to create a conscience and to awake the way where we are going to for stop and meditate. The book was written to think and halt the fall down.