Al analizar el vínculo entre guerras y salud de la población, surge la cuestión de si las guerras entre estados han influido o no, o en qué medida, en el desarrollo y enorme logro social del estado de bienestar avanzado en los países Occidentales. Guerra y bienestar son conceptos en principio antitéticos, aunque el análisis histórico de los dos últimos siglos ha llegado a vincularlos. La presente contribución se ocupa de las consecuencias de las guerras sobre el bienestar de la sociedad, y de cómo ...
Al analizar el vínculo entre guerras y salud de la población, surge la cuestión de si las guerras entre estados han influido o no, o en qué medida, en el desarrollo y enorme logro social del estado de bienestar avanzado en los países Occidentales. Guerra y bienestar son conceptos en principio antitéticos, aunque el análisis histórico de los dos últimos siglos ha llegado a vincularlos. La presente contribución se ocupa de las consecuencias de las guerras sobre el bienestar de la sociedad, y de cómo los gobiernos han intentado influir en esos efectos sea por motivos de legitimización o democracia, sea para compensar el descontento y sacrificio de la población. No se pone el foco en las consecuencias biológicas y sociales de las guerras, que son objeto de análisis en otros trabajos. Tampoco se ignora la belicosidad de la especie humana, primero en su lucha con otros animales, después con otros grupos humanos ya fuera para asegurar territorios, capturar esclavos y parejas o afirmar la masculinidad (Black, 2021).
El análisis se ciñe a las circunstancias en que han sido adoptados programas sociales orientados a mejorar el bienestar, donde la salud es siempre, directa o indirectamente, el elemento central. Sabemos que toda mejora o empeoramiento de los programas públicos sociales repercute en la salud individual y colectiva.
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