Si bien su preponderancia se consolida hacia finales del siglo pasado en las
teen movies y las chick-flicks, la narrativa de la makeover femenina puede rastrearse
en las primeras épocas del cine de Hollywood, una herencia que reclama tanto en
influjo del relato de Cenicienta como el del mito de Pigmalión. Dadas dicha longevidad
y perseverancia, el presente trabajo procura identificar las metamorfosis que ha
experimentado la misma representación de la “mujer transformada”, comprendiendo al
nuevo ...
Si bien su preponderancia se consolida hacia finales del siglo pasado en las
teen movies y las chick-flicks, la narrativa de la makeover femenina puede rastrearse
en las primeras épocas del cine de Hollywood, una herencia que reclama tanto en
influjo del relato de Cenicienta como el del mito de Pigmalión. Dadas dicha longevidad
y perseverancia, el presente trabajo procura identificar las metamorfosis que ha
experimentado la misma representación de la “mujer transformada”, comprendiendo al
nuevo milenio como vehículo para la redefinición de la travesía de la heroína ante la
“democratización” del milagro de la makeover por parte de los reality shows.
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Even if its preponderance was strengthened at the ends of last century
thanks to teen movies and chick-flicks, the female makeover narrative can be traced to
the first eras of Hollywood cinema, an inheritance that reclaims not only the influx of the
Cinderella story but also of the Pygmalion myth. Given such longevity and
perseverance, the current piece will try to identify the metamorphosis that the very
representation of the “transformed women” has undergone, understanding the new
millennium ...
Even if its preponderance was strengthened at the ends of last century
thanks to teen movies and chick-flicks, the female makeover narrative can be traced to
the first eras of Hollywood cinema, an inheritance that reclaims not only the influx of the
Cinderella story but also of the Pygmalion myth. Given such longevity and
perseverance, the current piece will try to identify the metamorphosis that the very
representation of the “transformed women” has undergone, understanding the new
millennium as a vehicle for the redefinition of the heroine’s journey, facing the
“democratization” of the miracle of the makeover driven by reality shows.
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