El artículo presenta una aproximación teórica para entender la transformación que los medios de comunicación han provocado en el deporte moderno profesional y, más concretamente, explora el llamado proceso de comodificación que en las últimas décadas ha convertido al deporte en un producto apto para el consumo de audiencias globales. Se proponen para examinar este fenómeno las relaciones entre sus tres agentes fundamentales: las instituciones deportivas, los medios y los fans. El trabajo reflexiona ...
El artículo presenta una aproximación teórica para entender la transformación que los medios de comunicación han provocado en el deporte moderno profesional y, más concretamente, explora el llamado proceso de comodificación que en las últimas décadas ha convertido al deporte en un producto apto para el consumo de audiencias globales. Se proponen para examinar este fenómeno las relaciones entre sus tres agentes fundamentales: las instituciones deportivas, los medios y los fans. El trabajo reflexiona sobre los problemas que el modelo plantea y constata la singularidad del producto deportivo, a medio camino entre la ganancia empresarial y la filiación sentimental.
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The article proposes a theoretical approach for understanding the transformation of the modern elite sport due to the influence of mass media and, more precisely, examines the so-called commodification process that in the last decades has turned sport into a commodity ready for global consumption. In order to asses the framework, the work identifies the relationship between three main actors: sporting institutions, media and fans. The author reflects on the downsides derived from the model while ...
The article proposes a theoretical approach for understanding the transformation of the modern elite sport due to the influence of mass media and, more precisely, examines the so-called commodification process that in the last decades has turned sport into a commodity ready for global consumption. In order to asses the framework, the work identifies the relationship between three main actors: sporting institutions, media and fans. The author reflects on the downsides derived from the model while ascertains the singularity of the sport as commodity-half lucrativee good, half sentiment.
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